Dicen que las proezas nunca vienen solas. Lo puede corroborar toda la plantilla del Atl Guardés, que ha padecido una semana horrorosa, con tres partidos fuera de su feudo. Cuatro vuelos y viajes maratonianos en bus. Pues no ha pasado nada y además se ha conseguido casi un pleno de 5 puntos, en dos canchas muy complicadas para puntuar.
La recta final de esta temporada, por el momento, es afortunada para el Atl Guardés, que, hace tres días pescaba en laa aguas del Rocasa y, hoy, Sábado, ha conseguido un punto de oro en el feudo del Elche, subcampeón liguero de la campaña anterior.
Partido en el Carrús, no apto para corazones sensibles. Minutos de tanteo para comprobar fuerzas y pulso entre ambas formaciones. En el minuto 13, las gallegas se colocan a un 5-8, peligroso para las ilicitanas y al descanso se llega con un 15-16, esperanzador para un Guardés, muy viajado, pero que no daba síntomas de fatiga.
El seguno tiempo fue aún más equilibrado. En el minutos 37, el mando pasaba a las manos del Elche: 20-17, pero el equipo de José Ignacio Prades, en lugar de acordarse de los kilómetros recorrido, cambió a un 22-24, en clara señal de que no había bandera blanca y a falta de un minuto, el Guardés ponía un 26-27 amenazador, pero Elche tapó la herida abierta e igualó a 27 tantos.
Conclusión. Un punto de oro para acercarse a Europa.
Foto Elche.